Viajaría mil kilómetros para encontrar otra de tus miradas. Desandaría un continente para disfrutar hasta la última de tus sonrisas. Navegaría un océano para paladear cada una de tus palabras. Y, sin embargo, a tu lado, siempre me quedaría el último palmo por recorrer.
domingo, 15 de julio de 2007
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2 comentarios:
Escribes esto y me pones en situación de soltar una grosería... me estas obligando a ello.
Bueno me contendré, ya que se trata de un blog refinado... pero a la próxima...
Tienes toda la razón: a veces rozo demasiado la línea de la cursileria. Será mejor que no te contegas y que me caiga más de un vacile. Así me contendré un poco más y abandonaré el monotema.
De todas formas, difícil va a ser que me enmiende, pues últimamente escribo todas estas cosas sin pensar. Sinceramenet, a veces pienso más en cómo casan las palabras que lo que éstas dicen.
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